viernes, 28 de diciembre de 2007

Leer libros, muchos libros.


Conozco muchas personas que han leído muchos libros y dejan ver que lo han hecho. He visitado casas donde hay bibliotecas que infunden respeto. En días pasados encontré un artículo de opinión en un diario nacional en el que se hacía referencia a personas que han hecho de los libros una pasión. El autor del artículo se permitió, inclusive, hacer como una especie de galería de los grandes lectores. Ese artículo genera este comentario.
Cuál es el sentido de haberse leído muchos libros en la vida ?
Será por el puro objetivo de alcanzar el mayor conocimiento posible ?.
Si lo aprendido de la lectura de libros no se difunde o no se coloca como una herramienta en alguna parte de la colectividad, entonces no tiene ningún sentido. Es como si alguien descubriera una solución contra el cáncer y no la revelase. O como que una persona haya acumulado obras de arte y no las exhiba.
En realidad, leer libros, muchos libros, es una parte importante del camino, tanto como la meditación o la reflexión sobre lo leído, y tanto como divulgarlo o utilizarlo de alguna manera.
En verdad, quien lee libros, más aún si son muchos, va formando dentro de sí y gracias a la meditación o reflexión de lo leído, muchos libros más que merecen ser exteriorizados de alguna manera y mejor todavía si se editan y distribuyen.
Una desproporción inclinada más hacia la lectura puede ser hasta mezquina. Prefiero personas que leen menor cantidad de libros y proporcionalmente hacen circular la riqueza que dimana de su reflexión o meditación.
Siempre en la vida el término medio, el equilibrio, es la meta.

1 comentario:

Joel Esparza dijo...

recuerdo una camapaña, supuestamente europea, que invitaba a que la gente plasmara una dedicatoria a un extraño cualquiera en las primeras páginas del libro, y luego lo dejara puesto en algún lugar de la ciudad, para que otro lo leyera.
tienes razón, un libro agarrando polvo no es un libro.
y el conocimiento guardado en un caja tampoco sirve de mucho